jueves, septiembre 27, 2007

Taitantas palabras (IV)


Ya no hay lágrimas.
El torreón antes era mi lugar favorito para esconderme cuando Arturo me perseguía con su caballo. Me decía que como era mujer no podía montar, me empeñé y aprendí, en las cuadras, gracias al paje de mi padre (que por cierto me miraba mucho al pecho cuando practicábamos el trote). Nunca se lo demostré, a Arturo digo, lo bien que montaba y todo lo que llegaba a correr. Una noche me escapé y recorrí con la melena suelta el puente que nos separaba de la aldea...
Nadie se enteró.
Si lo hubiesen sabido, hubiese tenido que esconderme en el torreón, otra vez, cerca de la alcoba de mi madre, bajo las escaleras como hacía cuando era pequeña.
No he vuelto a llorar desde que llegué al convento. La habitación es fría y no hay un colchón cómodo. Algunas noches el suelo me parece más confortable, a pesar de su dureza. Creo que también mi corazón ha dejado de ser blando.
Ya no hay lágrimas y la R de mi nombre empieza a sonar con más furia... MORGANA

domingo, septiembre 23, 2007

Todas las muñecas son carnívoras de Ángela Valley

Autor: Ángela Valley
Título: Todas las muñecas son carnívoras
Editorial: Destino
Colección: Áncora y Delfín
Pág.: 384
Precio: 17€
ISBN: 978-84-233-3855-9
Encuadernación: Rústica
Dimensiones: 14,5 x 22,7 cm
Publicación: 15/06/2006


Contraportada: "Sonia La Roja es la terapeuta de la que Ángela Vallvey se sirve para ser más mordaz, irónica y cáustica que nunca y ofrecernos, a través de sus pacientes, un fresco completo, una radiografía cómica pero certera de nosotros mismos. A través de esta divertidísima protagonista, y de otros personajes, la autora disecciona temas tan diversos como el sexo, las peleas conyugales, el rechazo, los pretendientes o las infidelidades. Todas las muñecas son carnívoras toca de lleno en la médula de nuestra esencia para despertarnos de nuestro letargo y removernos las entrañas en un texto socarrón pero sin fisuras que nos lleva, finalmente, a la reflexión."

Personalmente, creo que el libro va perdiendo fuerza conforme se desarrolla y el final me parece aberrante (aunque es una expresión que no me gusta usar para la literatura) en el peor sentido del término, casi una ofensa a la integridad de la doctora La Roja (protagonista de la obra).

Os dejo aquí el enlace a una entrevista que hicieron a la autora en El cultural.

Contraportada, ficha técnica e imagen de Ediciones Destino.

sábado, septiembre 01, 2007

De putas

"[...]¿Cuál es el oficio más antiguo del mundo? La prostitución no. Alguien tiene que haber trabajado en algo para poder ganar dinero y pagar a la puta[...] En todo caso el hecho más antiguo del mundo es el hecho de follar. El que diga que la prostitución es el oficio más antiguo del mundo es que cree que la mujer, cuando folla, ya es un puta. EL que dices eso es porque piensa que ninguna mujer folla en balde. Decir que la prostitución es el oficio más antiguo del mundo es igual que decir que todas las mujeres somos una putas[...] El oficio más antiguo del mundo a lo mejor será el de pastor, o el de labrador, o el de comerciante, o el de ladrón, pero no el de puta. A las putas las hacen los pastores, los labradores, los comerciantes y los ladrones. Las putas no se hacen solas ni por gusto." Juez y parte, Andreu Martín. Página 147