II
por eso los niños nos morimos de pena
es lo único que puede matarnos
la pena nos hincha como globos
y explotamos sin darnos cuenta
lo que no sabe el enemigo
es que somos un ejército invencible
que mece a sus muñecos
jugar, es un vocabulario
que sólo nosotros entendemos
(Página 24)
busca la niña
un agujero en la madera
redondo y perfecto
como un dios sencillo
sorbe poco a poco
el interior de un caracol
se encierra dentro
cree que no tiene alma
dos hermanas encuentra
y su idioma obstinado
círculo invisible
hilo infinito
puente de cáscaras
son tres como una oración
y aprenden a rezarse
-serás la pequeña
pero sola nunca-
(Página 35)
el aullido del animal
me perseguía los días
colgaba de tus manos
ese olor a muerte
la casa estaba vacía
y se llenaba de sangre
las paredes y el suelo
las plantas de aquel corral
sujétalo, decías
y un color encarnado
me invadía por dentro
un océano rojo
de gritos y ventanas
(Página 50)
de todos los caminos que no anduve
el que más duele tiene vértices menguantes
yo también soy zahorí
de la estirpe que busca
en las plumas del pájaro la levedad del agua
el que más me duele: no encontrarte
con tus huesos de niebla y la senda en tus manos
este abrazo en el pecho que vuela como una muerte
yo soy la hija famélica del cobre
y mi sima tan profunda como un caballo blanco
se riza en tu memoria y en tu memoria crece
de todos los caminos que no anduve
el que más duele es el mineral de tus ojos
tu monte de carnes dóciles, tu boca callada
como una ofrenda de huellas buscando pasos
siéntete orgulloso; yo también tengo tus labios
son dos troncos hinchados perdiéndose en tu ausencia
Lo lógico es empezar por el principio e ir avanzando. Te adentras en un lugar dónde la lógica se diluye entre la influencia de tantas otras opciones diferentes. Lee, Busca, Lee y encuentra lo que deseas. Si algo desconoces, pregunta!!
sábado, agosto 20, 2011
lunes, agosto 15, 2011
Facebook (I)
Vanlat recomienda el relato "Una conversación tranquila" de Charles Bukowski. Y por "recomienda" entiéndase "será la primera propuesta la próxima vez que alguien me pregunte qué leer".
Ya lo saben
viernes, junio 10, 2011
Camino de cualquier parte de Eduardo Mitre
Autor: Eduardo Mitre (amediavoz)
Páginas: 117
ISBN: 8475224016
PVP: ¿?
Año de publicación: 1998
Biblioteca del I.B. San Konstantin Ciril Filósofo, Ruse, Bulgaria.
Biblioteca del I.B. San Konstantin Ciril Filósofo, Ruse, Bulgaria.
Mitre es uno de esos autores formados en la visión estética de otros. Uno de esos estudiosos que escriben o escritores que estudian (nunca lo he tenido muy claro). Y se le nota. Sus poemas están llenos de referencias mitológicas, artísticas y literarias, sobre todo de la tradición hispanoamericana: Pablo Neruda y Juan Rulfo así a bote pronto. Recomendación uno: leánlo despacio, merece la pena saborearlo. Recomendación dos: háganlo con un diccionario de símbolos cerca. Lo necesitarán.
Enlaces interesantes: Periodistas y plumillas, El rincón del distraído y el buscador de Letras libres.
Imagen: Agapea.com
jueves, junio 09, 2011
Camino de cualquier parte de Eduardo Mitre (Algunos poemas III)
SOBRE TUS CEJAS
En dos trazos diseñan
lo que te sucede dentro.
Bosquejan lo que vives
en el bosque del sueño.
Jaspean el invisible
rostro del silencio.
Como tus brazos se extienden
y se estrechan
partidas como tu sexo
entre mis piernas.
Baja y sube la sed
por tus fuentes gemelas.
Paso bajo dos arcos:
desaparecen.
Entro en ti
y bebo a ciegas.
EPIFANÍA
Follaje de caricias y besos,
frutos los cuerpos
maduran dentro:
Se abren, se parten
en dos mitades
se comparten enteros:
Como una granada
estallan juntos justo a tiempo:
volcán de espumas
mar de brasas:
Un instante inmemorable
vislumbran ciegos
el rostro que dibuja
y borra el deseo.
Partes I y II
En dos trazos diseñan
lo que te sucede dentro.
Bosquejan lo que vives
en el bosque del sueño.
Jaspean el invisible
rostro del silencio.
Como tus brazos se extienden
y se estrechan
partidas como tu sexo
entre mis piernas.
Baja y sube la sed
por tus fuentes gemelas.
Paso bajo dos arcos:
desaparecen.
Entro en ti
y bebo a ciegas.
EPIFANÍA
Follaje de caricias y besos,
frutos los cuerpos
maduran dentro:
Se abren, se parten
en dos mitades
se comparten enteros:
Como una granada
estallan juntos justo a tiempo:
volcán de espumas
mar de brasas:
Un instante inmemorable
vislumbran ciegos
el rostro que dibuja
y borra el deseo.
Partes I y II
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Visor de Poesía
Camino de cualquier parte de Eduardo Mitre (Algunos poemas II)
EL ENEMIGO
No sé cómo abordarolo
sin que ahora me toque
y me tiemble la mano
y el pulso se azore.
Mejor estampar su bombre
-¿conjuro o indigna marca?-
en la frente alta y noble
de esta blanca en clama:
EL MIEDO
Lo veo sin verlo en la infancia,
tras el estampido del trueno
en las figuras que traza
en las manchas del techo.
Dibuja un círculo negro
y nos deja solos afuera
mientras todos se quedan
mirándonos desde adentro.
Insidiosamente nos cerca
como al niño extranjero
acorralado en el centro
de un baldío sin puerta.
Sin gracia ni ritmo calca
el aletazo del cuervo
o del paso enorme y quedo
de la tarántula.
Multiplica los corredores
en la planicie del sueño
y amasa hasta el vértigo
la cera de la metamorfosis.
Congela su vista la caras,
disloca sus rasgos y gestos,
y sin pudor las retrata
su infamante espejo.
Invisible, la soga al cuello,
su mano tira y afloja,
como el verdugo que juega
a si te dejo vivo o muerto.
Escondido, anda suelto
por calles, atajos y plazas,
donde fingimos no conocernos,
cómplices de su amenaza.
Nos posee alma y cuerpo,
y convierte a las palabras
en una mendaz mordaza
más abyecta que el silencio.
Petrifica a la alegría,
se confunde con el amor,
su presencia ubicua
simula el rostro de Dios.
El fruto vacío del mal
es su cotidiano alimento.
Imprevisible como el azar
su soplo de desaliento.
Nunca dominaremos
su gramática obscena,
ni su sintaxis perversa
regida por el suspenso.
BALADA POSTMODERNA
Tu voz allende el mar
suena en el auricular
como si estuvieras
en la otra pieza.
Sobre la mesa de noche:
el reloj, tu retrato
y la carta -por fax-
de tu puño y letra.
Mañana, ya inminentes
en la pantalla: tu risa,
tu mano, tu sortija,
tu cabellera y el peine.
Según se oye y se ve,
ya no queda tiempo
ni espacio
para la ausencia.
Sin olfato ni tacto,
todo se lo bebe
el simulacro
de la presencia.
Te escribo este poema
como una protesta
de amor que se rebela
a consentir la indiferencia.
EPIGRAMAS
(Selección)
GRAMÁTICA
De tus pies a tu frente,
tu cuerpo es una frase
en la que aprendo a nombrarte.
No sé cómo abordarolo
sin que ahora me toque
y me tiemble la mano
y el pulso se azore.
Mejor estampar su bombre
-¿conjuro o indigna marca?-
en la frente alta y noble
de esta blanca en clama:
EL MIEDO
Lo veo sin verlo en la infancia,
tras el estampido del trueno
en las figuras que traza
en las manchas del techo.
Dibuja un círculo negro
y nos deja solos afuera
mientras todos se quedan
mirándonos desde adentro.
Insidiosamente nos cerca
como al niño extranjero
acorralado en el centro
de un baldío sin puerta.
Sin gracia ni ritmo calca
el aletazo del cuervo
o del paso enorme y quedo
de la tarántula.
Multiplica los corredores
en la planicie del sueño
y amasa hasta el vértigo
la cera de la metamorfosis.
Congela su vista la caras,
disloca sus rasgos y gestos,
y sin pudor las retrata
su infamante espejo.
Invisible, la soga al cuello,
su mano tira y afloja,
como el verdugo que juega
a si te dejo vivo o muerto.
Escondido, anda suelto
por calles, atajos y plazas,
donde fingimos no conocernos,
cómplices de su amenaza.
Nos posee alma y cuerpo,
y convierte a las palabras
en una mendaz mordaza
más abyecta que el silencio.
Petrifica a la alegría,
se confunde con el amor,
su presencia ubicua
simula el rostro de Dios.
El fruto vacío del mal
es su cotidiano alimento.
Imprevisible como el azar
su soplo de desaliento.
Nunca dominaremos
su gramática obscena,
ni su sintaxis perversa
regida por el suspenso.
BALADA POSTMODERNA
Tu voz allende el mar
suena en el auricular
como si estuvieras
en la otra pieza.
Sobre la mesa de noche:
el reloj, tu retrato
y la carta -por fax-
de tu puño y letra.
Mañana, ya inminentes
en la pantalla: tu risa,
tu mano, tu sortija,
tu cabellera y el peine.
Según se oye y se ve,
ya no queda tiempo
ni espacio
para la ausencia.
Sin olfato ni tacto,
todo se lo bebe
el simulacro
de la presencia.
Te escribo este poema
como una protesta
de amor que se rebela
a consentir la indiferencia.
EPIGRAMAS
(Selección)
GRAMÁTICA
De tus pies a tu frente,
tu cuerpo es una frase
en la que aprendo a nombrarte.
Camino de cualquier parte de Eduardo Mitre (Algunos poemas I)
AEROPUERTOS
Entre partida y llegada
somos
las dos caras de Jano.
Vemos unos ojos
con lágrimas (atrás
en la anochecida
distancia) y vamns
hacia otros
suspendidos al alba
por el fértil asombro
de la mirada.
ZONA DE EMBARQUE
Se angosta el paisaje
al filo de los pasos.
Huele a paraje
el amplio espacio.
Se pisa una calzada
de luces y sombras
donde duda la mirada
y tropieza la memoria.
Es la zona de embarque
en el aeropuerto del tiempo.
Cada cuerpo es el pasajero,
la nave y el equipaje.
Y aguardábamos las señales,
inquietos, sin saber
si llamarán para emprender
o cancelar el viaje.
LARSEN
En Montevideo (ese recodo del tiempo)
la súbita revelación de tu rostro,
tu alta frente,
tu pelo hebreo,
el verde profundo de tus ojos,
la garúa de tus pasos
por el estuario,
la extraña sensasción
de habernos conocido hace tiempo,
el húmedo silencio
de tu boica en un cuarto,
la sabiduría inocente
de tu lengua en el beso,
el pausado
creciente
oleaje del deseo
y la sal de tu nombre
a ciegas esparcida
en el mar tempestuoso de tu cuerpo.
Luego, como al despertar de un sueño,
la navaja de la partida
hundida hasta el hueso,
y la sal del recuerdo
derramándose en la herida.
V.H.
Entre partida y llegada
somos
las dos caras de Jano.
Vemos unos ojos
con lágrimas (atrás
en la anochecida
distancia) y vamns
hacia otros
suspendidos al alba
por el fértil asombro
de la mirada.
ZONA DE EMBARQUE
Se angosta el paisaje
al filo de los pasos.
Huele a paraje
el amplio espacio.
Se pisa una calzada
de luces y sombras
donde duda la mirada
y tropieza la memoria.
Es la zona de embarque
en el aeropuerto del tiempo.
Cada cuerpo es el pasajero,
la nave y el equipaje.
Y aguardábamos las señales,
inquietos, sin saber
si llamarán para emprender
o cancelar el viaje.
LARSEN
En Montevideo (ese recodo del tiempo)
la súbita revelación de tu rostro,
tu alta frente,
tu pelo hebreo,
el verde profundo de tus ojos,
la garúa de tus pasos
por el estuario,
la extraña sensasción
de habernos conocido hace tiempo,
el húmedo silencio
de tu boica en un cuarto,
la sabiduría inocente
de tu lengua en el beso,
el pausado
creciente
oleaje del deseo
y la sal de tu nombre
a ciegas esparcida
en el mar tempestuoso de tu cuerpo.
Luego, como al despertar de un sueño,
la navaja de la partida
hundida hasta el hueso,
y la sal del recuerdo
derramándose en la herida.
V.H.
Eyes I shall not see again.T.S.E
La cantidad de infinito
patente en tus ojos,
y que como Tántalo ansío
sin probar ni un sorbo:
sin probar ni un sorbo:
This is my afliction.
PENA
Con la misma mano
que te hirió,
ciega de ira
como una pedrada;
con la mano cortada
por tu mejilla,
ahora macnho esta página,
sangro estas líneas.
VIÉNDOTE DORMIR
Las piernas recogidas,
las manos casi juntas,
una mejilla encendida,
una mejilla encendida,
la otra tibiamente oculta.
Toda entera, envuelta
en la cuna del sueño,
en posición contrita
respiras, regresas
al tiempo sin tiempo
anterior a tu nombre,
a la herida del nacimiento,
a la caída en ti misma.
Flor apacible, vuelta
semilla, a oscuras,
ajena a esta vida, buscas
otra menos cruenta.
miércoles, marzo 16, 2011
martes, febrero 15, 2011
Reza lo que sepas de David González
Autor: David González (web)
Título: Reza lo que sepas
Ilustraciones: Miguel Ángel Martín y Mik Baró
Editorial: Eclipsados
Páginas: 163
ISBN: 9788461103393
Año: 2006
Biblioteca del Instituto Bilingüe: Konstantin Kiril Filosof, Ruse, Bulgaria
Cuando comencé a leer encontraré ecos de un montón de gente, supe de la generación beat, de un padre donador de un ostias y de un caradura con ganas de escribir. Oí de cárceles y desperdicios, de muertos y kamikazes, de borrachos y yonkarras y digo oí, porque David González tiene un escribir que es un hablar. Y se nota. Los discursos se fragmentan en prosa y poesía, en imágenes descritas y plasmadas en si mismas. Una de esas joyas de los libros-producto. No me entiendan mal, no es algo comercial. Es algo que merece la pena leer y luego soltar. Soltar para que otro lo lea, porque a nadie le gusta tener una pistola apuntándote a la cabeza continuamente. Merece la pena notar la vibración de las balas, sentir la rabia y girar la cabeza para ver que dan en el blanco.
Reseña en Freek!
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Comentarios,
David González,
Editorial Eclipsados,
Poesía
Hace tanto frío en Alaska de Raúl García
BUSCADORES DE ORO
Nadie dijo que fuera fácil. Nadie dijo en ningún momento que lo íbamos a conseguir todo en esta vida, que nuestros sueños se iban a hacer realidad. Nadie nos dijo que estaríamos siempre juntos, que viajaríamos a países exóticos que sería Felicidad el nombre de nuestros hijos. Pero lo creímos. Nadie nos prometió nada, no había mentira alguna que creerse, pero la inventamos. Egoístamente siempre pensamos que nos merecemos más que el resto simplemente por el hecho de ser nosotros. Somos buscadores de oro, convencidos siempre de encontrar la gran veta. Veta que nunca aparece pero que seguimos buscando.
Página 23
THE TIMES THEY ARE A-CHANGING
Para Javi, confidente, barman, psiquiatraen ocasiones y siempre amigo.
Quién nos iba a decir que los tiempos cambian, ni siquiera Bob Dylan con sus gerundios parecía tener razón. Quién nos iba a decir que se necesitaba dinero para divertirse y para eso había que trabajar, que los amigos y las relaciones no duraban para siempre, que las barrigas no eran algo de tan mayores. Hasta Peter Pan creció y según me dijeron trabaja doce horas en una cadena de montaje subcontratado por una E.T.T. Qué le vamos a hacer, la vida es como una canción, metáfora exacta para los que como nosotros curamos las heridas con canciones, en ocasiones larga como el rock progresivo de Pink Floyd y en otras intensa y corta somo los Sex Pistols, y en medio hay solos y estribillos memorables como fotografías de otro tiempo. Lo jodido no es que los tiempos cambien es que pasan sin enterarte como cuando te quedas dormido en mitad de una canción.
Página 24
SIGUE BUSCANDO
Ni música de violines, ni campos Elyseos iluminados. Ni Turandot bajo una perfecta lluvia de otoño, ni vacaciones en Roma. Ni canciones susurradas al oído ni velitas, tampoco ramos de rosas ni encuentros dramáticos en estaciones de tren. Ni suicidios, ni imposibles, ni familias enfrentadas.
El amor, solía decir, no es más que una de esas tarjetas de rasca y gana en las que al final siempre sale la misma frase: SIGUE BUSCANDO.
Página 29
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Algunos fragmentos,
Editorial Eclipsados,
Poesía,
Raúl García
jueves, enero 27, 2011
Silvio en El Rosedal de Julio Ramón Ribeyro
Autor: Julio Ramón Ribeyro
Título: Silvio en El Rosedal
Editorial: Plaza y Janés
Colección: Relatos
Páginas: 94
ISBN: 8401570573
Año: 1998
Biblioteca del Instituto Bilingüe: Konstantin Kiril Filosof, Ruse, Bulgaria
Título: Silvio en El Rosedal
Editorial: Plaza y Janés
Colección: Relatos
Páginas: 94
ISBN: 8401570573
Año: 1998
Biblioteca del Instituto Bilingüe: Konstantin Kiril Filosof, Ruse, Bulgaria
Silvio en El Rosedal, uno de los relatos que han hecho de Julio RAmón Ribeyro uno de los mayores exponentes de la narrativa breve contemporánea, combina la profundidad y la transparencia, la densidad simbólica y la serenidad lírica. A través de la obsesión del protagonista, un violinista frustado, por el significado oculto de los signos dibujados por la peculiar disposición de las flores en su jardín y de la pasión amorosa que inesperadamente irrumpe en su vida, esta historia pone de manifiesto la insuperable distancia que separa el secreto mundo interior del individuo y la realidad circundante.
Imagen: Solo literatura
Adoro los libros pequeños porque son eso, pequeños y puedes llevarlos y traerlos y te hacen la compañía justa y necesaria. Cuando cogí el libro de entre los de la biblioteca del instituto lo hice por dos razones. La primera es que soy muy poco consciente de haber leído autores peruanos (hispanoamericanos en general) y la segunda porque necesitaba algo corto para relajar un poco mis lecturas actuales. El estilo es bastante simple, sin léxico complicado ni estructuras rebuscadas. Quizá sea eso lo que facilita una lectura sencilla que evoca imágenes de las haciendas americanas.
En definitiva, no está mal.
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Novela-Relatos,
Plaza-Janés
jueves, enero 20, 2011
Cuando yo caiga de Ramón Sampedro (algunos poemas)
Traducción de Alicia Domínguez
Cuando yo caiga
Cuando yo caiga, como fruto maduro del árbol de la vida,
dejadme allí mismo, donde yo caiga,
para que me abrace el sol y el viento y la luna,
que la vida me devore mordisco tras mordisco.
Que cada cual recoja el amor que me dio:
la luz, su luz; el agua, su agua,
la tierra, su ceniza; su espíritu, el viento.
Que coja cada cual lo que precise.
Pero que no me esconda la codicia humana
en el calabozo de los muertos, en una jaula sagrada
aferrada a un recuerdo, llorando como un niño
que no quiere devolver lo que se le prestó.
De la semilla al fruto fui empujado por el amor,
cuando vuelva al origen, derribado o caído,
amigo o enemigo, que no te cause espanto,
aunque te parezca que ya no tengo vida,
no es que esté muerto, me estoy recreando.
No me cubras de tierra, ni me metas en un nicho.
Si no quieres verme, llévame a campo abierto,
déjame mirando al cielo para irme esparciendo
entre todo lo que quiera llevarse de mí algo.
Un gusano, una mosca, un pájaro cualquiera...
hasta que me consuman por amor regalado
para empujar la vida soñando pero libre,
que cada uno recoja lo que me dio prestado.
Así, cuando caiga, dejadme caído
para retornar a la vida allí donde yo caiga.
Condición humana
Sentir silbar un viento, una tormenta,
una brisa, y rugir un volcán,
y el batir de unas alas en el fondo del sentimiento.
Sentirme gaviota, gorrión y golondrina.
Sentir la desesperación infinita de que la vida se agota.
Y el que el dolor del mundo va a más.
Querer saberlo todo y no conocer nada.
Sólo la torpe condición de un ser que pregunta
y no halla respuestas
¿Volveremos a vernos?
Volveremos a encontrarnos, tal vez
cuando la materia se junte de nuevo,
en la próxima contracción del universo.
Seremos, entonces, átomos compatibles.
Porque llevamos grabada en la memoria
un mensaje irrefrenable de sentirnos poseídos y poseer.
Un mismo deseo y una misma voluntad,
que los prejuicios impidieron unirse cuando nos miramos.
Volveremos desde el principio a vivir y amar
sin prejuicios, sin pecado, sin miedo, sin pudor,
para purificarnos de todo desatino.
Volveremos, tal vez, a encontrarnos,
por la fuerza universal del amor.
La madre
Cuando se os vaya,
sabréis, hijos, lo que es paciencia;
ella da, sin medida, la bondad humana,
la ternura grande como el sol que calienta,
la brisa suave que serena el alma.
Maestra en la escuela de enseñar la vida
con la sabiduría del corazón humano,
tal vez la conciencia os diga algún día
que fue mal pagada,
pero será tarde para pagar la deuda
del amor de la madre, cuando se os vaya.
Nana para un niño libre
Duérmete, mi niño, si quieres dormir.
Que no te adormezcan los otros por ti.
Que no te adormezcan con sus propios miedos
aquellos que tienen miedo a vivir.
Despierta, mi niño, cuando alguien te cante
melodiosas nanas para dormir,
que no serás libre si te ponen delante
otros los caminos por donde has de ir.
Que te den sólo, si quieres ser libre,
lo que tú les pidas besos, que te den besos,
si pides veneno, que sea veneno.
No duermas, niño, si quieres ser libre,
porque si duermes te han de entregar,
cuando crezcas, tus padres a otros amos
para que duermas cuando oigas cantar.
Cantos patriotas, cantos militares,
cantos de alabanza, sin saber a quiénm
que quieren llevarte del útero al foso
diciéndote siempre: es por tu bien.
Duérmete, mi niño, si quieres dormir.
Duérmete, mi niño, que yo estoy aquí
para defenderte cuando adormezcas
con falsos cantares de un mundo feliz.
Enmarcado en:
Algunos fragmentos,
Alicia Domínguez (trad),
MR ediciones,
Poesía,
Ramón Sampedro
Cuando yo caiga de Ramón Sampedro
Título: Cuando yo caiga
Traductora: Alicia Domínguez
Autor: Ramón Sampedro
Editorial: Martínez Roncal Ediciones
Colección: Heterodoxia
Páginas: 133
ISBN: 9788427031128
Año: 2004
Biblioteca del Instituto Bilingüe: Konstantin Kiril Filosof, Ruse, Bulgaria
Traductora: Alicia Domínguez
Autor: Ramón Sampedro
Editorial: Martínez Roncal Ediciones
Colección: Heterodoxia
Páginas: 133
ISBN: 9788427031128
Año: 2004
Biblioteca del Instituto Bilingüe: Konstantin Kiril Filosof, Ruse, Bulgaria
Los poemas de Cuando yo caiga pertenecen ya al mejor tesoro de la humanidad. Como la primeras conchas recogidas en las costas del fin de la tierra por el niño libre que emergió de la cuna. Manuel Rivas (extracto del prólogo).
Imagen: Librería Luces
Ramón Sampedro estuvo 55 años postrado en una cama a causa de una tetraplejia causada por una mala caída., durante ese tipo escribió esta colección de poemas que sus allegados decidieron publicar tras su muerte en 1998. Se hizo famoso por luchar por una muerte digna.
La cuestión de la muerte está presente a lo largo de todo el poemario, también el amor, el rechazo a su situación física y a las personas y leyes que le negaban su deseo de morir. De corte clásico y naturalista, la obra de Sampedro habla del mar y del aire y suena a libertad. Contiene fuertes críticas contra los curas, jueces y políticos y muestra explícitamente las ideas comunistas de su autor. Hay, además, poemas de amor que paralizan al lector transmitiendo la sensación de incapacidad con la que tanto tiempo convivió.
Algunos fragmentos pueden encontrarse aquí.
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Alicia Domínguez (trad),
Comentarios,
MR ediciones,
Poesía,
Ramón Sampedro
miércoles, enero 19, 2011
Cuentos de adúlteros desorientados de Juan José Millás
Autor: Juan José Millás (web)
Título: Cuentos de adúlteros desorientados
Editorial: Lumen
Páginas
ISBN: 978843462423
Año: 2003
Libro libre (journal), gentileza de Miscelánea a través de la BBOX clásica.
Título: Cuentos de adúlteros desorientados
Editorial: Lumen
Páginas
ISBN: 978843462423
Año: 2003
Libro libre (journal), gentileza de Miscelánea a través de la BBOX clásica.
"El adulterio, por suerte o por desgracia, es un tema de eterna actualidad, y los 'Cuentos de adúlteros desorientados' lo analizan desde todos los puntos de vista: oiremos así la voz de los verdugos, que se empeñan en pecar hasta confundir a la amante con la esposa, y oiremos la voz de las víctimas, patéticas en su dignidad ofendida... Pero, y sobre todo, oiremos la voz de Juan José Millás, su personalísima visión del adulterio"
Imagen y texto: Fnac/Club cultura
La verdad es que el libro me ha gustado muchísimo. Millás es uno de los autores favoritos de mi madre, pero nunca me había llamado la atención. Supongo que es normal en una casa con tantos libros, muchos pasan desapercibidos.
Imagen y texto: Fnac/Club cultura
La verdad es que el libro me ha gustado muchísimo. Millás es uno de los autores favoritos de mi madre, pero nunca me había llamado la atención. Supongo que es normal en una casa con tantos libros, muchos pasan desapercibidos.
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Juan José Millás,
Libro libre,
Lumen,
Novela-Relatos
Parece que volvemos
Tras un intento de crear una web en googlesites que no contaba con las prestaciones que yo quería (no había etiquetas, no se podía comentar), he decidido reconstruir el blog. Volveré a colgar críticas y comentarios, incluso el "diario" becero, permanezcan atentos a sus pantallas, este año viene cargadito de novedades: nuevos retos, nuevos juegos y, sobre todo, nuevos libros que, al fin y al cabo, es eso por lo que estamos aquí.
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